DECANO DEL COLEGIO DE ARQUITECTOS VASCO-NAVARRO Manuel Sagastume se licenció como arquitecto en la Universidad de Navarra y se instaló en Pamplona para comenzar a dejar su huella en el trazo urbano de la ciudad de la mano del arquitecto Fernando Redín. Desde entonces, ha protagonizado buena parte del lavado de cara del Casco Antiguo de Pamplona y ha dejado su impronta en edificios como la Audiencia y la nueva Estación de Autobuses, proyecto que hubo de lidiar con la dificultad de insertarse en un área de interés patrimonial como la Ciudadela. Desde 2008 y durante tres años presidirá el Colegio de Arquitectos Vasco-Navarro, un cargo que ya conoció en una época muy distinta, el trienio 1978-1981.